miércoles, 30 de junio de 2010

Zassross 42

Juntos dieron vueltas buscando a la adivina, y entonces a lo lejos vieron a una persona. -¿Quién viene a visitarme?- Dijo una voz femenina en cuyo tono se notaba el peso de los años.-

Qassis y Zassross se acercaron cautelosamente, sentada en una roca se encontraba una anciana, vestida de pieles de animales.

-¿Eres tu la adivina?- preguntó Zassross.

-Acérquense más que no puedo oírlos- dijo la anciana.

Al acercarse más una fuerte ráfaga de viento sopló sobre los dos, lanzándolos por los aires. Zassross logró asirse de un tronco con sus dedos, pero Qassis se estrelló contra un árbol y quedó inconsciente por un momento.

La vieja en la piedra había desaparecido y en su lugar un hombre alto de cabello azul-celeste, sonreía mientras se acercaba.

-Parece que no eres un humano ordinario.- Continuó mientras con un movimiento circular de su brazo inició una ráfaga de viento que se convirtió en un remolino.

Zassross se soltó y calló al suelo.

a) Zassross toma a Qassiss y huye
b) Zassross oculta a Qassis luego ataca
c) Zassross ataca

viernes, 11 de junio de 2010

Qassis 2



Liass Sumo Sacerdotiza de Aesieff

Capítulo 2


La lujosa casa de la familia Zreisiae, estaba también descuidada, la guerra también había afectado a los ricos y aunque no habían perdido toda su gran fortuna, había escasez de servidumbre en la ciudad. La señora Vasria, en su lúgubre vestido negro veía jugar a su única hija Quassis. Hacía un par de meses que había recibido la noticia confirmando la muerte de su amado esposo el Comandante Zreisiae en la última batalla contra los invasores.


La pequeña Quassis jugaba con una muñeca de fina manufactura que habría pasado por manos de su madre y de su abuela, tres generaciones de juegos, que para los Sfaers es sinónimos de al rededor de cuatro siglos.


Derepente la niña empezó a llorar desconsoladamente, su madre se dirigió hacia ella, rapidamente pero sin perder la elegancia característica de la aristocracia. -Mami, la muñeca de abuelita, se ha quemado- dijo la niña entre sollosos, y efectivamente, luego de buscar con la mirada Vasria, se vió con la sorpresa de que de la muñeca solo quedaba un pedaso carbonizado que brillaba anaranjado con la brisa de la tarde.


Vasria levantó a su hija en brazos, y le dijo – Hija mía, no llores más, esta es una señal, nuestra diosa, Vesra nos ha bendecido.

martes, 8 de junio de 2010

Iexalin 8

Iexalin aguanta el calor sin decir nada, y sigue el camino con Cott y Lu. De pronto como si un volcán hiciera erupción flamas empezaron a salir de la tierra justo bajo los pies de Cott e Iexalin. Iexalin cayó desmayada.

Al despertar escuchó la voz grave y elegante de lu diciendo -Buenas noches-

Luego la voz de tono jovial de Cott -Parece que hemos caído en una trampa, ¿no es eso extraño?-

- Dónde estamos- dijo Iexalin quién no tenía fuerzas ni para levantarse pero la briza fría de la noche la había reanimado. Podía escuchar el mar a lo lejos pero no veía nada.

-Estamos en una muy pobre versión de una celda echa de maderos y sogas- Dijo Cott.

Se escuchó un murmullo a lo lejos...

-¿Qué pasó, Lu? ¿Lu?, ¿Qué pasa contigo Lu? ¡Respóndeme!- Dijo Cott desesperado y sin el tono alegre que caracterizaba su voz.

- ¿Qué pasó?- dijo Iexalin quien haciendo un esfuerzo pudo levantarse a tantear al rededor sintiendo la maltrecha jaula.

Se encendió una luz verde y una joven con un báculo luminoso se acercó, la luz les permitió ver el lugar, era una cueva adaptada de alguna manera para hacer las veces de celda y laboratorio, en una mesa se veían diferentes pipetas, tubos, y otros extraños objetos.

-Bien venida, bien venida. Es increíble, parece que los rumores eran ciertos, una mujer de raza de hielo y como si fuera poco un sujeto con un extraño sombrero mágico. Qué fortuna la mía el ser la primera en enterarme ja ja.



Qué hace Iexalin

a) No responde.
b) Exige información.
c) Decide cooperar con su captora.